Al final de la audiencia general, el Santo Padre Francisco invitó a rezar a los santos patronos de Roma, cuya solemnidad la Iglesia celebrará el próximo sábado, para que “los pueblos que sufren la guerra” vuelvan a encontrar pronto la paz. También en sus saludos en varios idiomas, pidió ayuda y apoyo para quienes están en las garras de la drogadicción