El Dicasterio para la Cultura ofreció anoche, 16 de febrero, en la basílica vaticana un viaje artístico y espiritual muy sugestivo. «El arte tiene que hacer redescubrir la belleza y ser de algún modo consolador en un momento histórico tan difícil», observó el director Chiodi, que ha realizado el escenario. «El arte necesita coraje, creo mucho en nuestra profesión como oportunidad para la esperanza».