En ciudad de Gulue, en la Uganda septentrional, sor Rosemary Nyirumbe y sus hermanas de la Congregación del Sagrado Corazón de Jesús ayudan a las mujeres que han sido agredidas por los rebeldes a “coser la propia vida juntas, como retales de estofa”. Gracias a la “fantasía de la misericordia” y a las máquinas de coser, ya han salvado a varios miles de mujeres, rechazadas por las comunidades locales.