El Patriarca Latino escribe a la diócesis de Jerusalén recordando la importancia de la jornada de oración por la paz deseada por el Papa Francisco para el 27 de octubre. Dura condena de los ataques contra Israel y los bombardeos en Gaza. Sólo el fin de décadas de ocupación y una perspectiva nacional clara para Palestina pueden poner fin al conflicto, escribe, pidiendo a Dios el coraje para que todos “pidan justicia sin difundir el odio”.