En su mensaje para el Domingo del Mar, el 14 de julio, el Cardenal Prefecto del Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral invita a las Iglesias a dar visibilidad a quienes trabajan en el sector marítimo, promoviendo su dignidad y sus derechos. Mirando a la obra de San Pablo, el cardenal insta a fomentar el intercambio y la solidaridad entre pueblos y religiones: “No podemos abrirnos a las posibilidades de la vida si preferimos las comodidades de lo familiar”