El mayor intercambio de prisioneros desde la Guerra Fría entre Estados Unidos y Rusia y otros cinco países aliados. Tuvo lugar ayer y en él participan 26 personas. Se trata de periodistas, militares y diversos funcionarios encarcelados en los últimos años, sobre cuya liberación se venía negociando desde hacía tiempo. En Estados Unidos, el presidente Biden y la vicepresidente Kamala Harris aplauden el intercambio, mientras Trump truena: acuerdo desfavorable para EE.UU.