En un videomensaje dirigido a los participantes en el encuentro que se celebra en la capital albanesa del 15 al 21 de septiembre, Francisco les invita a ser «peregrinos de la esperanza y a seguir los signos de Dios» para que el Mediterráneo sea un mar de fraternidad y de paz «y deje de ser un cementerio». Sobre los migrantes: toda persona es sagrada, «renunciemos a la cultura del miedo para abrir la puerta de la acogida y de la amistad».