Hablando en el contexto de una reunión de alto nivel en las Naciones Unidas, el cardenal secretario de Estado de la Santa Sede afirmó que «la eliminación total» de los arsenales nucleares es la única manera de hacer frente a las «tensiones» dictadas por el «estado actual de los asuntos mundiales» y el riesgo de su «uso deliberado o accidental». En un segundo llamamiento sobre la resistencia a los antimicrobianos, reiteró la petición del Papa de que «la salud no es un lujo»