Entre los diálogos en la ciudad, organizados con motivo del Jubileo de la Comunicación, en el Augustinianum decenas de trabajadores de la información procedentes de todo el mundo pudieron interactuar con los periodistas que testimoniaro en el Vaticano. La invitación fue nuevamente a iluminar la esperanza, resistir las crecientes formas de corrupción en el sector de los medios, construir alianzas más fuertes entre periodistas, instituciones y lectores, tener fe en la verdad.