El mensaje navideño del Patriarca de Bagdad de los Caldeos, dirigido a cristianos y musulmanes, es “un llamado para todos a vivir como hermanos”. La esperanza es que el Jubileo elimine las “causas de conflictos destructivos y tragedias de injusticia, avaricia, corrupción y negligencia” para lograr “crear equilibrios, una armonía estable y seguridad entre los pueblos”