Un documento de la Comisión Pontificia para la Protección de Menores llama la atención de los responsables de la Iglesia católica, de cara al próximo Consistorio y de la Asamblea Sinodal en el Vaticano, sobre la labor de contrarrestar y prevenir los casos de abusos a menores y personas vulnerables por parte de miembros de la misma Iglesia. Hay que hacer más y mejor, se exhorta, utilizando todos los métodos posibles y superando las actuales deficiencias y lagunas.