El prefecto del Dicasterio para los Obispos clausuró, el pasado domingo, la Fiesta del Perdón de San Nicolás de Tolentino con una celebración eucarística e instó a ser misericordiosos, como enseña Francisco desde el inicio de su pontificado: “La Iglesia debe acoger, acompañar, perdonar y vivir en comunión”. Una petición de oración a los fieles también para el Sínodo de octubre